Continuo con la segunda entrega de este artículo que encontré entre mis archivos secretos de mi Biblioteca personal. Volvemos a los griegos.
Ellos separaron religión y conocimiento científico, división que aún persiste. Platón explicó que no existe una verdad válida a nivel general o, por lo menos, no es aún perceptible para nosotros. Aristóteles determinará la separación entre lógica y magia, entre ciencias naturales , metafísica y religión, separando el cuerpo del espíritu. Sólo ese espíritu es inmortal., procede del campo de lo transcendental y sólo es accesible a los dioses. La verdad fue dividida en una verdad religiosa de los teólogos y en el razonamiento crítico de la ciencia. Ambas facultades sólo responden a las preguntas para las que se creen competentes. Así los teólogos buscan el sentido de la vida, luchan con el problema de la muerte y del Más Allá; los científicos buscan la materia, tanto la atómica como la cósmica, intentan explicar el mundo partiendo de sí mismo, o sea, mediante leyes de la naturaleza.