En esta oportunidad quiero escribir acerca de los sacerdotes que hicieron parte de la historia celta como lo fueron los Druidas. Magos, eruditos, religiosos y sanguinarios; los druidas actuaban como enlace entre su combativo pueblo y los dioses.
En el año 43, los romanos, bajo las órdenes de su general Claudio y tras dos desafortunados intentos preparaban la invasión a Bretaña por tercera vez. Sometieron a una gran parte del país y con especial interés devastaron la isla de Mona. Esta era llamada la Roma de los Celtas isleños. Como centro espiritual, albergaba sus templos más importantes.